La Organización de Naciones Unidas alertó este jueves que la crisis alimentaria en Gaza ha alcanzado niveles sin precedentes, con 6.000 camiones humanitarios esperando autorización para ingresar al enclave. Mientras tanto, Israel acusa a las agencias internacionales de no distribuir la ayuda ya presente en el territorio.
La situación humanitaria en la Franja de Gaza sigue deteriorándose rápidamente. La ONU advirtió este jueves que «la crisis de hambre en Gaza nunca ha sido tan grave», y denunció que miles de camiones con ayuda humanitaria siguen varados sin poder ingresar al enclave palestino.
«Los palestinos no estamos cerca de la hambruna, la estamos viviendo», declaró un médico en Gaza, mientras que un trabajador humanitario señaló que «el hambre está en todas partes». La comunidad internacional ha manifestado su preocupación por el colapso del sistema de asistencia humanitaria en la región.
Por su parte, Israel sostiene que no hay obstáculos por su parte para la entrega de ayuda. Las autoridades israelíes afirmaron que este miércoles la ONU y otras agencias recolectaron alimentos de solo 150 camiones dentro de Gaza, y aseguraron que otros 800 están listos para ser recogidos y distribuidos.
Las Fuerzas de Defensa de Israel publicaron un video donde, según ellos, se observa a más de 950 camiones cargados estacionados dentro de la frontera con Gaza. El gobierno israelí culpó directamente a la ONU por no gestionar eficientemente la recolección y distribución de los suministros.
Este cruce de versiones se produce en un contexto donde las necesidades alimentarias en Gaza aumentan de forma alarmante, mientras la infraestructura para recibir y distribuir ayuda está gravemente afectada por meses de conflicto. La falta de coordinación efectiva entre las partes involucradas pone en riesgo la vida de cientos de miles de civiles atrapados en medio de la emergencia.
