
Más de 2.000 camiones de carga permanecen varados en el paso fronterizo de Tambo Quemado debido a fuertes nevadas que bloquearon el tránsito hacia Chile. Los conductores enfrentan temperaturas bajo cero y dificultades sanitarias, mientras las autoridades esperan mejoras en las condiciones climáticas para restablecer el paso.
Unos 2.000 camiones con carga de exportación están detenidos en el paso de Tambo Quemado, en la frontera con Chile, debido a intensas nevadas que interrumpieron el tránsito en la zona desde el fin de semana. La situación afecta directamente a los transportistas, quienes enfrentan condiciones extremas de frío y limitaciones en el acceso a servicios básicos, como atención médica y alimentos.
El presidente de la Cámara Boliviana de Transporte Pesado, Héctor Mercado, confirmó que el flujo habitual por este punto fronterizo es de aproximadamente 300 camiones diarios, lo que agrava el congestionamiento con el paso de los días. A pesar de que algunos optaron por desviar sus rutas hacia Pisiga, esta alternativa no ofrece las mismas condiciones logísticas ni de tránsito continuo.

“El paso por Pisiga se está utilizando como medida de contingencia, pero no es una frontera que permita un tránsito fluido como Tambo Quemado”, explicó Mercado. Añadió que los Carabineros de Chile mantienen bloqueado el acceso hacia su territorio hasta que las condiciones de seguridad en carretera mejoren.
El paso fronterizo Tambo Quemado–Chungará es clave para las exportaciones bolivianas, especialmente en el transporte de minerales como estaño, antimonio y plomo, además de productos agroindustriales como torta de soya, frutas, cereales y madera.
Durante el fin de semana, el paso estuvo completamente cerrado por la acumulación de nieve, y aunque el tránsito fue parcialmente restablecido este lunes, las autoridades de ambos países piden circular con extrema precaución.
El ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño, indicó que se mantiene una coordinación constante con sus pares chilenos y que se aguarda un nuevo reporte climático para evaluar una reapertura plena del paso.
Los transportistas solicitaron el despliegue de personal médico en la zona fronteriza, debido a dolencias causadas por la exposición prolongada a temperaturas extremas, y advirtieron sobre la necesidad urgente de insumos básicos para los cientos de conductores atrapados en la frontera.