
Un ciudadano boliviano fue arrestado en el paso fronterizo de Chungará, en territorio chileno, tras ser descubierto con más de un millón de bolivianos en efectivo y decenas de tarjetas bancarias ocultas en su vehículo. El caso podría estar vinculado a una red transnacional de lavado de dinero.
Un ciudadano boliviano fue detenido en el complejo fronterizo de Chungará luego de que funcionarios del Servicio Nacional de Aduanas de Chile encontraran Bs 1.279.000 en efectivo y 51 tarjetas de crédito de distintas entidades financieras escondidas en su vehículo.
El hallazgo se produjo durante un control de rutina, cuando los agentes detectaron un peso inusual en una de las puertas del automóvil. Al inspeccionar más a fondo, con apoyo del Servicio Agrícola Ganadero (SAG), se encontraron compartimentos ocultos en puertas, respaldos y debajo de los asientos, donde se escondían los fajos de dinero.
El conductor, de nacionalidad boliviana, fue inmediatamente puesto a disposición de Carabineros y pasó a control de detención. Las autoridades chilenas indicaron que la operación se enmarca en la Ley 21.632, que sanciona el ingreso o salida de dinero no declarado, y forma parte de una estrategia contra el crimen organizado transfronterizo.

“Estamos frente a un caso que podría revelar una estructura mayor de tráfico financiero. El uso de múltiples tarjetas de crédito es un patrón investigado por su posible relación con lavado de dinero o fraudes bancarios”, afirmó el director regional de Aduanas de Arica, James Alarcón Contreras.
El operativo ha generado la apertura de una investigación binacional entre Chile y Bolivia para rastrear el origen de los fondos, verificar la legalidad de las tarjetas y determinar si estas eran utilizadas para transacciones ilícitas. Las autoridades no descartan que el detenido sea parte de una red internacional dedicada al movimiento clandestino de capitales.
Actualmente, el ciudadano boliviano se encuentra bajo custodia judicial en Chile. Se espera que en los próximos días la Fiscalía de ese país formalice cargos en su contra.
Por su parte, las autoridades bolivianas, a través de sus agregadurías consulares, siguen de cerca el caso dada la magnitud del decomiso y su potencial impacto regional en la lucha contra delitos financieros.
Fuente: El Deber