
La cotización del dólar paralelo en Bolivia cayó a Bs 10,93, marcando una tendencia a la baja tras meses de presión cambiaria. El Banco Central atribuye el descenso a menor incertidumbre y un mayor flujo de divisas, aunque persisten dudas sobre la sostenibilidad económica.
El dólar paralelo en Bolivia registró este martes una nueva caída, cotizándose en Bs 10,93 para la venta y Bs 11,02 para la compra cerca de las 21:00. La baja confirma una tendencia descendente sostenida desde hace varios meses, luego de que la divisa estadounidense llegara a rozar los Bs 20 en la primera mitad de 2024, en un contexto marcado por la escasez de dólares, el deterioro de las reservas internacionales y una fuerte presión sobre la demanda.

Según el Banco Central de Bolivia (BCB), esta disminución obedece principalmente a una menor incertidumbre política y social, que ha reducido la especulación en el mercado informal. El presidente del BCB, Edwin Rojas, explicó que el superávit comercial del sector privado está generando un mayor ingreso de divisas, lo que permite aliviar la presión sobre el mercado cambiario. A esto se suman instrumentos como el Bono Bicentenario y el uso de activos virtuales, que, según la entidad, están ayudando a fortalecer la estabilidad del tipo de cambio.
El BCB también señala una mayor dinamización del comercio exterior como otro factor que está contribuyendo a una relativa normalización del acceso a dólares, en contraste con la situación crítica vivida meses atrás. No obstante, analistas como el economista Fernando Romero consideran que esta mejora podría tener un carácter transitorio, vinculada más a factores coyunturales como las expectativas electorales y una menor demanda estacional de divisas, que a cambios estructurales en la economía.
La diferencia entre el tipo de cambio paralelo y el oficial —que permanece fijo desde 2011 en Bs 6,96 para la venta y Bs 6,86 para la compra— sigue siendo significativa, lo que refleja una tensión persistente en el sistema cambiario boliviano. Aunque el retroceso del dólar informal representa un respiro para la economía, el debate de fondo sobre la sostenibilidad del régimen cambiario y la capacidad del país de generar suficientes divisas continúa sin resolverse.
Fuente: El Deber